Los Árboles son Mágicos.
Y no es porque lo digamos nosotros, es que lo son, forman parte de la cultura, la mitología, la religión y los sentimientos más íntimos del ser humano.
Los árboles han jugado un importante papel en la religión, en la magia y la industria, como por ejemplo el árbol de Navidad, y tienen también un gran simbolismo en la filosofía y la cultura, por ejemplo el árbol de la sabiduría.
En diversas culturas el árbol se ha considerado sagrado. En la iconografía cristiana tiene asociada toda una serie. Es el eje entre los mundos inferior, terrestre y celeste. Coincide con la cruz de la Redención.
La cruz está representada muchas veces como árbol de la vida. Este árbol de la vida surge por primera vez en el arte de los pueblos orientales; es el hom o árbol central colocado entre dos animales afrontados o dos seres fabulosos; es un tema mesopotámico que pasó a Extremo Oriente y Occidente por medio de los persas, árabes y bizantinos. Para las teogonías orientales el hom tiene un sentido cósmico, está situado en el centro del Universo y se mueve con la idea del dios creador. Dos árboles míticos o simbólicos mencionados por primera vez en la Biblia en el libro del Génesis.
Estos árboles serían llamados “árbol del conocimiento del bien y el mal” y el “árbol de la vida”. En el paraíso el árbol de la vida estaba en medio del huerto, pero protegido de los hombres.25 En el claustro de la iglesia de Santa María la Real de Nieva en la provincia de Segovia (España), en algunos capiteles se encuentra la representación del hom oriental como símbolo del árbol de la vida:
Árbol con el león y el toro alados (que representan a Marcos de Ostia y Lucas el Evangelista) que están defendiendo al hom.
Un pino, y a sus lados unos perros con rostro humano cubiertos por capucha. Son los canes dominicanos como defensores del hom.
En otro capitel, los animales son dos búhos, símbolo de la sabiduría y la noche, también defendiendo al hom.
Los budistas, hinduistas y jainistas consideran sagrado cierto tipo de higuera llamada por ello higuera sagrada bajo la cual, creen, Buda alcanzó el nirvana. Yggdrasil es el árbol mítico de los nórdicos, un fresno perenne al que consideraban el “árbol de la vida”, o “fresno del universo”. Los antiguos sajones tenían también un árbol sagrado, Irminsul, que Carlomagno ordenó destruir cuando los atacó.
En la mitología grecorromana, distintos tipos de árboles y otras plantas han sido consagrados a diferentes divinidades:
El haya y la encina estaban consagradas a Júpiter.
El pino estaba consagrado a Cibeles.
El olivo se consagraba a Minerva.
El laurel, a Apolo.
El mirto y el loto, a Venus.
El ciprés, a Plutón.
El narciso, a Proserpina.
El fresno a Marte.
La adormidera, a Ceres y a Lucina.
La viña, el pámpano y la hiedra a Baco.
El álamo, a Hércules.
El cedro, el aliso y el enebro a las Euménides.
La palmera, a las Musas.
El plátano, a los Genios.